Plaza de Santo Domingo
Escucha la música
Puntual descripción de las reales plausibles y augustas fiestas con que la ciudad de Murcia ha celebrado el feliz ingreso en España y coronación de Carlos Tercero por don Juan Antonio Salvan y Lavaña.
En este evento recordamos la proclamación popular del rey Carlos III en la ciudad de Murcia en el año 1759. Esta celebración se llevó a cabo en la Plaza del Mercado, la actual plaza de Santo domingo.
Nadie mejor para ilustrarles este evento con su relato que la persona que se ocupó de anotar el discurrir de la celebración para la posteridad, don Juan Antonio Salván y Lavaña. El lo cuenta más o menos así:
En la plaza del Mercado se hallaba un espacioso Tablado, de dos Cuerpos, y el primero de ochenta varas cada frontis, y diez palmos de Alzada, vestidos y adornados de terciopelo Carmesí, Alfombrados sus pavimentos y dos escaleras de bastante magnitud, una que miraba a dichas Puertas del Mercado, y la otra, a las Casas de los Caballeros Castillas, y la del Segundo Cuerpo hacia frente al Real Convento de Santo Domingo. Una vez llegada la comitiva junto a él, rompió, con suma destreza, y Armonía, el golpe de la Música, que motivó el mayor gusto, tras lo que se colocaron sobre el tablado los distintos cuerpos de caballeros y, en la parte superior, el corregidor con el pendón y la bandera real, quien desde ese lugar realizó la proclamación de Carlos III por los cuatro costados. Fue contestada con el disparo de salvas por la tropa, música y vítores del pueblo allí reunido. Después se volvió a formar el cortejo con igual disposición, retornando al Ayuntamiento por el siguiente recorrido: Trapería, Platería, plaza de Santa Catalina, Lencería, cantón de la Purísima, plazuela de San Pedro, Frenería, Puerta del Sol y Arenal.
En la plaza del Mercado se hallaba “[…] un espacioso Tablado, de dos Cuerpos, y el primero de ochenta varas cada frontis, y diez palmos de Alzada, vestidos y adornados de terciopelo Carmesí, Alfombrados sus pavimentos y dos escaleras de bastante magnitud, una que miraba a dichas Puertas del Mercado, y la otra, a las Casas de los Caballeros Castillas, y la del Segundo Cuerpo hacia frente al Real Convento de Santo Domingo, y ambos, con Balaustres, y antepechos, dados de color encarnado […]”29. Una vez llegada la comitiva junto a él, “[…] rompió, con suma destreza, y Armonía, el golpe de la Música, que motivó el mayor gusto […]”30, tras lo que se colocaron sobre el tablado los distintos cuerpos de caballeros y, en la parte superior, el corregidor con el pendón y la bandera real, quien desde ese lugar realizó la proclamación de Carlos III por los cuatro costados del tablado pronunciando la tradicional fórmula de “[…] Castilla: Murcia: por la Majestad del Rey nuestro Señor Don Carlos Tercero […]”31, que fue contestada con el disparo de salvas por la tropa,
música y vítores del pueblo allí reunido. Después se volvió a formar el cortejo con igual disposición, retornando al Ayuntamiento por el siguiente recorrido: Trapería, Platería, plaza de Santa Catalina, Lencería, cantón de la Purísima, plazuela de San Pedro, Frenería, Puerta del Sol y Arenal. Ya el día 5 de noviembre, a partir de las tres de la tarde el corregidor visitó las cárceles para liberar a algunos presos por gracia de la proclamación real; posteriormente, el corregidor ofreció un refrigerio a los miembros del Ayuntamiento.
Escucha las locuciones
Para saber más:
Torres-Fontes Suárez, C. (1992). Proclamación de Luis I como Rey de España en Murcia. Imafronte, Vol. 8-9, 1992-1993.
Caballero, C. I. P. El triunfo de la monarquía: música y arquitectura efímera en Murcia para las procclamaciones reales (1700-1789).